La artista catracha le dio un espacio a ICN para hablar de su talento, de su visión y de la escena artística en el país.

-“En Honduras no hay una carrera especial para estudiar artes plásticas”, asegura Kemee.

Nycole Suazo o “Kemee” para sus amigos y para el mundo artístico. Es una talentosa y hermosa hondureña que nos transporta con su magia a través de sus manos, sus lienzos y aerosoles.

Además, la hondureña cuenta con una voz privilegiada y le adelantó a ICN que está incursionando en el mundo musical del Hip Hop.

“Kemee” forma parte del Colectivo de Culturas Vivas (CCV) y nos dice que su estilo de arte es el geometrismo y el futurismo.

Y así comenzó la plática con Kemee, una chica brillante, audaz y con un espíritu de vida que contagia. Inspira.

¿Cómo inició en el mundo del arte?

Yo comencé andando en patineta y luego miraba los grafittis y me parecían interesantes.

Llegué un punto que cuando era adolescente (17 años), estaba en el colegio y no tenía como proporcionarme materiales para producir grafitti, entonces empecé a hacer (vender) dibujos en el colegio. De las ganancias que hacía con los dibujos, empecé a comprar los aerosoles; así comencé hacer arte.

¿Qué fue lo que le llamó la atención primero: la ilustración, el grafitti, ¿la música o algo más? ¿Por qué?

Desde pequeña estuve ligada al arte. A mi padre le gusta el arte, pero personalmente me gusta el dibujo. Ahora produzco música, pero primero fue el dibujo.

¿Cuáles son los temas que aborda en el grafitti y la ilustración?

A mí me mueve bastante la filosofía. Me gusta que las personas vean mis pinturas, mis grafittis y que piensen en lo que está pasando. Me gusta el surrealismo, me gusta tocar temas sociales, la lucha del pueblo, la lucha trabajadora y las expresiones de los pueblos originarios. En conclusión, me gusta trabajar en temas que promueven y generen diálogos.

¿Cómo percibe la escena cultural en Honduras?

Se están abriendo bastantes espacios. El efecto post pandemia nos ha venido a enseñar de que el arte es bastante importante en la vida de las personas. El arte estuvo presente (en tiempos de pandemia) y me parece que esa sensibilidad se pudo tocar con el arte. Siento que la juventud está proponiendo y eso lo hace interesante.

¿Qué necesitan los y las artistas en nuestro país?

Necesitamos apoyo, pero no el apoyo de decir “esta bonito el arte”. No me refiero a eso. Me refiero a contribuir y como responsabilidad del Estado necesitamos proyectos para impulsar el arte, presupuesto para arte y cultura, espacios para que se pueda crear arte. En Honduras no hay una carrera especial para estudiar artes plásticas, uno tiene que estudiar pedagogía y ahí se estudia: teatro, música y danza. No hay una especialidad.

¿Cuál ha sido su experiencia interactuando con la sociedad hondureña, siendo una mujer joven y artista?

Yo he tenido experiencia en ser grafittera o muralista urbana.

En la música llevo un año y estoy empezando a salir en las tarimas y escenarios. En este punto de mi vida puedo decir hay varios matices.

¿Es difícil entrar al arte en Honduras siendo mujer?

Yo siento que, así como están funcionando las cosas hoy en día no es difícil. Lo que hay que tener es disciplina y las ganas de hacer bien las cosas, la fuerza de hacer las cosas, porque hoy en día las cosas están bien globalizadas en el sentido de que dibujar algo ya lo puedes compartir y te pueden conocer las personas.

Yo creo que el arte no es como el Mesías de que vengo a salvar esta situación y lo voy a llenar todo de color y una situación super idílica, definitivamente no.

El arte tiene que ser una herramienta de transformación. Podemos transformar cosas a través de la cultura y del arte.