Roma.- Este martes las autoridades italianas desarticularon una red de narcotráfico que operaba en Italia, España y Alemania, facilitando el transporte de drogas entre la península ibérica y la República Italiana.

La operación, contó con la participación de cuerpos de seguridad de varios países, incluida la Policía Nacional española, llevó a los carabineros italianos a emitir órdenes de arresto contra 12 personas de diversas nacionalidades: italianos, españoles, argentinos y colombianos.

Esta red traficaba con estupefacientes como hachís y cocaína, importándolos desde España para su distribución en Italia después de transportarlos por carretera ocultos en camiones hasta los almacenes situados en la región de Abruzzo, en el centro de Italia, uno de sus puntos clave de mercado, según informaron en un comunicado.

Antecedentes

La investigación sobre esta organización, descrita por los carabineros como de tipo mafioso, se inició en 2021 por orden del tribunal del Aquila y Teramo, contando con la colaboración de la Agencia de la Unión Europea para la cooperación judicial penal (Eurojust) y la Agencia de la UE para la cooperación policial (Europol).

Diez de los sospechosos fueron enviados a prisión, dos quedaron bajo arresto domiciliario, y a otros dos se les impuso la obligación de presentarse ante la Policía judicial. Todos enfrentan acusaciones por asociación para el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes o psicotrópicas, así como por producción, tráfico y posesión de drogas.

Según los carabineros, la organización criminal contaba con una estructura jerárquica que incluía altos directivos, hombres de confianza y socios tanto en Italia como en el extranjero, con puntos de referencia operativos en España y Alemania.

Decomisos

Durante la operación se realizaron varias incautaciones que totalizaron cien kilos de hachís y un kilo de cocaína, además de registros llevados a cabo en España como parte de las diligencias.

A fines de junio, la policía italiana también desmanteló otra organización en Messina, Sicilia, que importaba drogas desde España, Países Bajos y otras regiones italianas, generando ganancias mensuales estimadas en 500.000 euros.

Esta organización criminal, activa desde 2020, había logrado controlar plazas de distribución de drogas en seis barrios de Messina antes de ser intervenida por las autoridades.