La Agencia de Regulación Sanitaria (ARSA) ordenó el cierre temporal de un restaurante chino en la capital debido a graves deficiencias en las condiciones higiénico-sanitarias. Durante la inspección, el personal de ARSA encontró varias irregularidades críticas:

• Áreas de cocina con deficiencias en higiene
• Empleados sin la indumentaria adecuada
• Falta de tarjetas de salud y análisis clínicos del personal
• Alimentos en contacto directo con el piso
• Presencia de mascotas en zonas de preparación de alimentos
• Almacenamiento de productos vencidos
• Ausencia de registros de control de plagas y fumigación
• Presencia de excremento de roedores
• Contaminación cruzada de productos cárnicos en los equipos fríos

ARSA notificó al propietario sobre las razones del cierre, otorgándole un plazo para subsanar las irregularidades y mejorar las condiciones del establecimiento. La agencia reafirma su compromiso con la salud pública y mantendrá una estricta vigilancia sanitaria para asegurar el cumplimiento de la ley en todos los establecimientos del país.

En otra inspección, ARSA atendió una denuncia en redes sociales y revisó un local de venta de baleadas en el Bulevar Morazán. El personal encontró deficiencias similares en higiene, manipulación de alimentos y falta de control de plagas. ARSA ordenó la limpieza y desinfección de áreas, equipos y utensilios, la destrucción de productos por posible contaminación cruzada, y el correcto almacenamiento de los productos.