El peso de poder de Juan Carlos “El Tigre” Bonilla fue determinante a la hora de recibir una sentencia de 19 años por parte del juez Kevin Castel, aseguró el abogado Marlon Duarte. Duarte también reclamó que los sistemas judiciales no pueden seguir señalando solo a los productores, sino que deben incluir a toda la cadena, incluyendo los grandes distribuidores de droga que están en Estados Unidos. Para Duarte, el tratado de extradición tiene una apariencia de igualitario, pero en realidad no lo es. Básicamente, solo han salido hondureños al extranjero, pero no han traído a los grandes distribuidores a ser juzgados en América.

Según Duarte, debido a la sentencia, Bonilla apenas recibiría un 15% del total de la pena, lo que equivale a poco más de 2 años y 8 meses. En el mejor de los casos, podría lograr una resentencia que cambie la pena de 19 años dictada hoy por el juez Kevin Castel. En cuanto a la cárcel donde será asignado Bonilla, Duarte afirmó que puede aspirar a una cárcel de máxima o mediana seguridad por ser extranjero.

Esta sentencia marca un punto crítico en la lucha contra el narcotráfico en Honduras, reflejando la complejidad y el alcance de las redes delictivas. La declaración de Duarte pone en evidencia las desigualdades y desafíos que enfrenta el sistema judicial hondureño en colaboración con Estados Unidos. La expectativa ahora se centra en cómo evolucionará el proceso judicial de Bonilla y si habrá un cambio significativo en las políticas de extradición que aborden de manera más equitativa a todos los involucrados en la cadena del narcotráfico.