Tensión persistente entre Shakira y Gerard Piqué

La tensión entre la cantante colombiana Shakira y el exfutbolista Gerard Piqué continúa dos años después de su separación. La reciente disputa gira en torno a la lujosa mansión que ambos comparten en Barcelona, la cual sigue sin venderse y está generando problemas significativos.

La mansión de la discordia

La propiedad en cuestión es una lujosa residencia ubicada en la urbanización Ciutat Diagonal de Esplugues de Llobregat, un área exclusiva en Barcelona. Este inmueble, que consta de tres mansiones en el mismo terreno, ha sido el hogar de la pareja desde 2012 hasta 2023. La valoración actual de la mansión es de 14 millones de euros, una cifra considerablemente alta para el mercado local.

Conflictos de valor y acuerdos fallidos

El año pasado, Shakira y Piqué alcanzaron un acuerdo para la venta de la propiedad, pero desavenencias surgieron cuando Piqué propuso reducir el precio de venta a 7 millones de euros. Shakira se mantuvo firme en su demanda de los 14 millones de euros, lo que llevó a un estancamiento en la venta. Según informes de Espejo Público, Shakira habría adoptado una postura más dura, sugiriendo que su intención era dificultar la venta y no vender la propiedad bajo las condiciones propuestas por Piqué.

Uso y condiciones de la mansión

Dado que la mansión no se ha vendido, Shakira y Piqué utilizan la propiedad regularmente, pero bajo estrictas condiciones. Shakira, quien reside en Miami con sus hijos Sasha y Milán, ha impuesto reglas severas para el uso de la casa. Según los informes, ella exige que los empleados de la mansión retiren cualquier cosa que haya estado en contacto con la novia actual de Piqué, Clara Chía, y que estos objetos sean eliminados. Esto indica una clara intención de evitar cualquier vínculo con la nueva pareja de Piqué durante sus visitas a la mansión.