Tegucigalpa.- Juan Carlos “El Tigre” Bonilla, exdirector de la Policía Nacional de Honduras, compareció ante el juez Kevin Castel en Nueva York, donde admitió sus errores y pidió clemencia. Bonilla, quien se declaró culpable de narcotráfico,, recibió 19 años de cárcel.

En su declaración entes de la sentencia, Bonilla expresó su gratitud por la presencia de su familia y amigos, suplicando al juez: “Ten piedad de mí. Cometí un error. Fiscal, todos queremos abrazar a nuestros hijos. Que Dios te dé sabiduría. ¿Cuánto tiempo me queda? Estoy más allí que aquí. Quiero decir, estoy aquí. Gracias.”

Durante la audiencia, el juez Castel cuestionó la credibilidad del testigo clave Alex Ardón, indicando que dos jurados creyeron en su testimonio. La defensa de Bonilla argumentó que Ardón mencionó a Tony Hernández en relación con un asesinato usando munición perforadora, y que no había testigos directos del hecho.

El Fiscal Federal Auxiliar alegó que Tony Hernández y Alex Ardón utilizaron a Bonilla para cometer asesinatos, y Díaz Morales testificó que Bonilla estaba dispuesto a ejecutar dichos crímenes. Aunque la defensa admitió la implicación de Bonilla en narcotráfico, negó su participación en los asesinatos.

El abogado de Bonilla subrayó la presencia de su familia en el tribunal y mencionó las condiciones médicas del exjefe policial, argumentando que una sentencia de 30 años sería equivalente a una condena de muerte debido a su edad y estado de salud. “¿Quién sabe qué tan seguro estaría en Honduras? Tiene 64 años. Incluso veinte años probablemente serían una sentencia de muerte. Entonces, ¿por qué aceptó la declaración? Pide 10 años,” argumentó la defensa.

Bonilla concluyó su declaración reiterando su agradecimiento por la presencia de su familia y amigos y pidiendo clemencia: “Esto fue como una muerte anunciada. Ten piedad de mí. Cometí un error. Que Dios te dé sabiduría. ¿Cuánto tiempo me queda? Estoy más allí que aquí. Quiero decir, estoy aquí. Gracias.”

Considerado una pieza clave en el caso contra el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, Bonilla fue acusado de ser cómplice en actividades relacionadas con el narcotráfico, contribuyendo a los vínculos mafiosos en Honduras. La sentencia de Hernández, dictada el 26 de junio de este año, fue de 45 años de prisión más 5 años de libertad condicional. Bonilla, quien dirigió la Policía Nacional de Honduras entre 2012 y 2013, también fue conocido por su lucha contra grupos criminales como la MS-13.